La forma en cómo pensamos y sentimos
da forma al mundo que nos rodea. Aquellas ideas y pensamientos que alimentamos
de manera constante con nuestro diálogo interno serán las que determinen
nuestra personalidad y la forma en cómo reaccionamos ante los eventos que la
vida nos va presentando en el día a día.
Pon atención y observa detenidamente
cuáles son los pensamientos que predominan en tu mente y cuáles son tus
reacciones más habituales. ¿Te sientes ofendido de manera constante ante las actitudes
de los demás? ¿Crees que tus circunstancias son causadas por las acciones de
otros? ¿Culpas al gobierno por que la situación no mejora? ¿Vas por la vida con
el ceño fruncido y a la expectativa de que algo malo suceda?
Y aún más, y quizás esta pregunta te
diga mucho de ti mismo y tu actitud: ¿cuál es la reacción general de las personas cuando llegas a
un lugar? ¿Se quedan en silencio, a la expectativa o hasta con cara de
desagrado? o bien, ¿se les ilumina el rostro con una sonrisa y la alegría se
hace presente? ¡Cuidado! Pues eso puede ser el indicador de que no
estás teniendo una actitud muy positiva.
Pues bien, si tus respuestas te han hecho darte cuenta que no has estado tomando
la mejor de las actitudes los siguientes puntos podrán ayudarte a ver las cosas
en perspectiva y valorar el porqué es beneficioso tener una actitud positiva.
- Alcanzar el éxito. Tener una actitud positiva te mantendrá enfocado en el lado bueno de las cosas, a realizarlas y ser más productivo. Cuando tienes una actitud positiva estás enfocado en alcanzar el éxito.
- Mejora la salud. Una actitud de alegría y esperanza ante la vida genera sentimientos de vitalidad, tu estado de ánimo se mantiene alto y tu salud se ve directamente afectada. Recuerda que lograr la maestría en cualquier arte requiere práctica, ejercítate en desarrollar una actitud positiva y ve cómo tu salud mejora notablemente
- Atraes amigos. Estar enfocado de manera constante en lo positivo no solamente saca lo mejor de ti sino que también te hace ver lo mejor en las demás personas, tu trato hacia los demás mejora, dejas de juzgar y aprendes a convivir con armonía y respeto.
- Mejora tu autoestima. Cuando comienzas a ver el lado positivo tanto del mundo como de ti mismo generas una nueva inercia del fracaso hacia el éxito, tu mente reacciona en consecuencia y los pensamientos y emociones que se generan en tu mente cambian de sentido, alimentando de manera positiva tu autoestima. Entre más acciones hacia lo positivo realices más y mejores pensamientos y emociones aparecerán en tu Ser.
- Atraes abundancia. Al tener una actitud positiva estás mandando el universo y al mundo entero la señal de que estás listo para gozar y beneficiarte de la armonía, la alegría, el amor, la paz y la riqueza, tanto material como espiritual. Ponte en consonancia con el aspecto positivo del mundo y prepárate para recibir los dones que la vida tiene para ti.
- Mejora tu rendimiento. ¿Has notado que tu energía se mantiene baja? ¿Estás todo el tiempo cansado, desganado o apático? Eso es resultado de estar manteniendo tu atención en lo negativo, despójate y despéjate de todos los pensamientos y emociones limitantes. Redireccionar tu mente hacia el éxito y el triunfo generarán en ti un súbito flujo de energía que te permitirá aumentar el ritmo de tus actividades y por tanto mejorar tu rendimiento. ¡Enfócate en tu meta!
- ¡Felicidad!. La actitud positiva es un estado generado en el mismo centro de nuestro ser, es algo que no se puede fingir o simular; pretender tener un actitud positiva mientras sigues guardando los mismos patrones internos es cambiar la forma dejando intacto el fondo, lo cual a la larga resulta insostenible. Generar una actitud positiva es conectarse con esa fuente de energía divina que toca nuestros ojos permitiéndonos ver la luz en donde antes había oscuridad, tener paz donde había conflicto, gratitud en lugar de queja, es realizar el hecho de que la Felicidad siempre estuvo a nuestro alcance, SOLO DEBÍAMOS CAMBIAR EL ENFOQUE.
Estos son sólo algunos de los aspectos
en los que te verás beneficiado si aprendes a generar y mantener una actitud
positiva. No se trata de ir por la vida ingenuamente con una sonsa sonrisa, ajeno
a las circunstancias que te rodean, ¡No!, se trata de comprender que la vida está
conformada por un flujo constante de energía y que depende de nosotros cuál
será la calidad o “nota” con que la impregnemos y hagamos vibrar.
En el universo todo vibra, todo está
constituido por una energía que responde al poder de la voluntad, tú tienes el
poder de moldear esta energía y elegir la ruta de tu destino.
Recuerda:
“El sentido de las cosas no está en las cosas mismas, sino
en nuestra actitud hacia ellas”. Antoine De Saint Exupery
¡Mantente
positivo!