CÓMO AFRONTAR Y SUPERAR LA ANSIEDAD - 3ª. PARTE - “10 CONSEJOS INFALIBLES”

¡VIVE LIBRE DE ANSIEDAD!

            ¡Qué tal mis queridos amigos! Espero estén teniendo un día maravilloso y con todo el ánimo, disposición y buena vibra.

            Si has estado siguiendo este artículo sobre la ansiedad el día de hoy vamos a darlo por terminado con esta tercera parte en la que te compartiré 10 tips más para combatirla y dejarla en el pasado como sólo un recuerdo y un peldaño más en la escalera de la experiencia de vida.

            Como ya vimos este trastorno de ansiedad puede verse reflejado en toda una serie de síntomas que afectan nuestro Ser en lo físico, emocional y psicológico, repercutiendo en nuestra conducta y convirtiendo las circunstancias ordinarias de la vida en todo un dolor de cabeza.

            Demos paso entonces y pongámonos manos a la obra.

1. Aprender a respirar correctamente. Cuando somos presa de la ansiedad nuestra respiración se ve afectada de manera inmediata provocando en la mayoría de los casos hiperventilación, lo cual puede desencadenar en nauseas, mareos o incluso perdida de la conciencia. Si sientes que estás a punto de caer en un ataque de ansiedad toma el control sobre tus funciones e inhala profunda y lentamente, si ya has aprendido alguna técnica de respiración ponla en práctica; te sugiero ahondar en el tema de la respiración diafragmática.
2. Intenta dormir. El insomnio suele ser uno de los síntomas de este trastorno y, como todo en él, conllevar un efecto en cadena afectando otros aspectos de nuestro Ser. Cuando no tenemos un sueño de calidad nuestras defensas menguan, nuestro estado de lucidez y concentración se ve mermado y comenzamos a sentirnos desganados y sin fuerza para realizar nuestras actividades; intenta a toda costa dormir lo necesario. Si despiertas por la noche ponte a leer algún texto que te ayude a reducir tu ansiedad, escucha o ve algún video motivacional que te ayude a direccionar tu atención hacia lo positivo y no divagar con situaciones negativas en tu mente.
3. Busca compañía y apoyo. De vez en cuando mantenerse sólo y alejado puede ser bueno cuando sufrimos de ansiedad pero a la larga es contraproducente pues la soledad genera un estado de aislamiento y demasiado tiempo libre para llenarse la cabeza con ideas muy contrarias a lo que pretendemos. Busca la compañía de aquellas personas que amas y te aman, abre tu corazón sin miedo y con confianza, no tienes nada de qué preocuparte, nada qué demostrar, reconoce que necesitas ayuda y apoyo. Te aseguro con toda certeza que tus seres amados no te juzgarán y siempre estarán dispuestos a brindarte el apoyo y confort que necesitas.
4. Cuida tu alimentación. Evita alimentos que resulten pesados para tu digestión, consume alimentos frescos y lo más natural posible, dile adiós a la comida chatarra. No consumas alimentos muy tarde por la noche pues el proceso de digestión afectará la calidad de tu descanso.
5. Evita los estimulantes. Incrementar la sensación de ansiedad es lo peor que puedes hacer; no consumas alimentos o bebidas que exciten tu metabolismo, evita la cafeína, el chocolate, refresco de cola o con altos contenido de azúcar.
6. Evita las conductas muletas. Algunas conductas pueden llegar a convertirse en muletas cuando nos sentimos ansiosos, distrae tu mente y dirige tu atención hacia conductas que ayuden a superar tu ansiedad en lugar de incrementarla; comer, fumar, beber o el uso de drogas y fármacos pueden llegar a mitigar sus síntomas pero a la larga sólo habrás magnificado el daño hacia ti mismo generando un estado de mayor de ansiedad.
7. Recurre a la naturaleza. La manzanilla, valeriana, pasiflora, lavanda, magnesio y complejo B son todos recursos que la naturaleza nos brinda y que están a nuestro alcance para servirnos de ellos. Ya sea en infusiones o té, por medio de la aromaterapia o ingeridos, estos elementos pueden ayudarte a reducir los niveles de ansiedad.
8. Ataca los síntomas. Anticípate, observa y aprende cuáles son las situaciones que desencadenas en ti la ansiedad y mantente alerta para atacar de manera directa los síntomas, es decir, si sabes que llegar a algún lugar o estar con determinadas personas te pondrá ansioso controla de manera anticipada tu respiración, enfócate en los aspectos positivos de dicho encuentro, relaja tus músculos, visualízate a ti mismo tranquilo y confiado.
9. Consulta un especialista. Siempre que te encuentres ante algún padecimiento físico, psicológico o emocional que sientas está escapando de tu control y que no hayas sido capaz de superar por tu cuenta consigue ayuda profesional de manera inmediata. Nunca, por ninguna motivo, los consejos que puedan brindarte otras personas tendrán comparación con el tratamiento que pueda darte un médico o terapeuta especialista en la materia del mal que te aqueja. Existen situaciones que todos somos capaces de superar aplicando el poder de nuestra voluntad con determinación y disciplina pero siempre habrá grados patológicos que escapen de nuestro control.
10. ¡Actúa!. ¡Ponte en acción, muévete, haz algo! Permanecer sentado lamentándote de tu estado, viendo como los síntomas crecen o como tu situación empeora de ninguna manera te llevará a sanar. Es necesario que emprendas la acción y te decidas a salir de una vez por todas de cualquier estado que esté impidiendo que obtengas aquello que te pertenece por derecho: ¡tu felicidad y el paz interior!

            Espero de todo corazón que lo compartido contigo al respecto de este tema te haya sido de ayuda, nadie tiene por que vivir en la zozobra y la angustia. La felicidad es tu estado natural y no debes permitir que nada venga a robártela junto con el bienestar y la calma.

            Para algunos es más fácil superar los desafíos de la vida que para otros, mas siempre habrá gente dispuesta a brindarte su apoyo a través de su experiencia, confía y actúa.

            Reflexiona:

            “Mi vida ha estado llena de terribles desgracias, la mayoría de las cuales nunca sucedieron”. Michel de Montaigne.

¡Pon manos a la obra!