Espero
estés pasando un estupendo día y cada vez con más entusiasmo para recibir el
año que se avecina. Hoy quise hablarte un poco sobre un valor cada vez más en
desuso, una virtud, que por tenerla olvidada en el cajón más oscuro de nuestro
Ser, el mundo se ha hecho cada vez un sitio más frió y sombrío, Te hablo de la GRATITUD.
A todos nos
enseñaron de pequeños que cuando se nos daba algo debíamos retribuir el gesto
con un simple “gracias”,
este demostraba que sentíamos apreciación o reconocíamos este gesto como algo
de valor. Sin embargo, esto no para ahí, el decir gracias, más que ser un gesto
de cortesía o la muestra de nuestra buena educación y buenas costumbres, es una
virtud poderosa que puede llegar a crear en nosotros EMOCIONES SUPERIORES y cambiar nuestra
vida de una manera maravillosa.
Es muy claro
y cotidiano el ejemplo de esa gente que anda con el ceño fruncido,
malhumoradas, siempre con una mueca de desagrado en su rostro y que no son
capaces de agradecer cuando alguien les ofrece o comparte algo. Pareciera que
llevan una nube gris sobre sus cabezas y en cualquier momento se les desatará
la tormenta. Sabemos que son personas que no han podido salir del ciclo de la negatividad
(ver el post ¿PORQUÉ ALGUNAS PERSONAS SON NEGATIVAS?) y deben aprender a modificar
su inventario y proyectar mejores películas mentales.
LA GRATITUD NO PARA EN EL
DECIR “GRACIAS”, ES SENTIR EL RECONOCIMIENTO PROFUNDO DE QUE AQUELLO QUE
ESTAMOS OBTENIENDO O QUE YA TENEMOS ES
UN DON, UN REGALO DE LA VIDA, LA OPORTUNIDAD
DE APRECIAR EL MILAGRO DE LA EXISTENCIA Y
SER FELICES.
Te lo expliqué en el post “PARE DE SUFRIR”, no es sino hasta que hemos conocido la carencia, la enfermedad, la pérdida, la angustia e incertidumbre, que valoramos todas las cosas que tenemos en nuestro presente. No tiene caso lamentarse por las cosas que se fueron y que no tenemos ya; no tiene caso devanarse los sesos pensando en cómo obtener mayores y mejores cosas en un futuro. Debemos aprender a vivir con gratitud nuestro ahora y la dicha que surgirá de esta apreciación nos dará la motivación y actitud adecuada para alcanzar todas nuestras metas.
Cuando eres
una persona agradecida te llenas de alegría, se genera en ti un entusiasmo que
es contagioso y tu actitud se vuelve abierta, luminosa y radiante, a donde sea
que vayas la gente te sonríe, se acerca a ti, porque percibe que estás en Paz
y contento con la dicha de estar en éste maravillosos momento, en este
maravilloso espacio. La gratitud DESARROLLA LA HUMILDAD y EXPANDE EL AMOR de formas que parecen mágicas
pero que no son más que la consecuencia lógica de tu actuar.
¿Qué hay
muchos problemas en el mundo, que las cosas no van bien, que de verdad tienes
muchos conflictos? No me atrevería a hablarte de esto si yo mismo no hubiera
padecido y logrado trascender la adversidad. De verdad no me cansaré de decírtelo:
EL SECRETO
ESTÁ EN LA ACCIÓN. ¡Actúa, actúa, actúa! y agradece los dones que recibes.
Se
agradecido con las personas que te rodean, quizás ellas no lo sean pero ese no
es impedimento para que tú sí lo hagas. Agradece los gestos más pequeños y
verás cómo tu percepción comienza a cambiar, observa y analiza tus
circunstancias, compara lo que tienes con tantos otros que no tienen, compara
lo que dices no tener con tantos otros que de verdad viven en la carencia.
Se agradecido, PRACTICA LA VIRTUD DE LA GRATITUD y cambia tu vida.
Se agradecido, PRACTICA LA VIRTUD DE LA GRATITUD y cambia tu vida.
Recuerda:
“Mientras el río corra, los
montes hagan sombra y en el cielo haya estrellas, debe durar la memoria del
beneficio recibido en la mente del hombre agradecido”. Virgilio
Y
por cierto:
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Deja tus comentarios, saber lo que piensas es muy importante para mejorar continuamente.