Hoy te quiero platicar un poco sobre tres factores determinantes para lograr desarrollar una autoconfianza sólida y poderosa. La autoconfianza va de la mano con la autoestima, el amor propio, es la capacidad que tenemos de hacer frente a las vicisitudes de la vida con entereza, firmeza y determinación.
Para poder desarrollar una autoconfianza digna de un Ser íntegro, completo y bien formado, es necesario pasar por todo un proceso de transformación, depuración y regeneración. Es vital analizar a fondo cuáles son las ideas con las que han, o has, construido la imagen de ti mismo; ponderar aquellas que son útiles de aquellas que no lo son, las que son verdaderas de aquellas que son mentira.
La AUTOCONFIANZA es parte integral de lo que somos, si existen fallas en ella no seremos capaces de relacionarnos de manera exitosa, armónica y equilibrada con el mundo que nos rodea, las personas e incluso con nosotros mismos. Sentir miedo, nerviosismo, timidez son todas emociones normales en un ser humano pero deben de ser controladas a fin de alcanzar el equilibrio emocional que nos permita tomar las riendas de nuestro actuar y conquistar nuestras metas.
Pues bien, para poder desarrollar una poderosa confianza en ti mismo primero que nada debes:
A. ACEPTAR. Para poder cambiar o mejorar algo primero debemos aceptar que eso necesita ser cambiado o mejorado. Si crees que ya tienes una autoconfianza inamovible, a prueba de cualquier adversidad, ni siquiera te tomarás la molestia de intentar ver qué fallas pueden existir. Esa suele ser una actitud sustentada en la vanidad y la egomanía, para poder crecer uno debe reconocer con humildad que tiene carencias y que siempre está en posibilidad de mejorar. Desarrollar una confianza sana en sí mismo es un trabajo de todos los días, por el resto de tu vida. La existencia siempre nos pondrá a prueba de diferentes maneras y nunca sabemos lo que nos puede tocar. Acepta tus carencias y ábrete al cambio, permítete reconocer que no eres perfecto pero si perfectible.
B. BUSCAR AYUDA. Una vez que has reconocido que hay fallas en tu autoconfianza debes emprender la paciente y diligente tarea de recabar toda la información necesaria para superar tus temores, desarrollar tus habilidades y adquirir nuevos y mejores hábitos que te llevarán a construir una autoconfianza firme, basada en al autocontrol, la templanza, la comprensión y una actitud ganadora. Compra libros, descárgalos de la Web, escucha audiolibros, suscríbete a una página de frases de motivación, satúrate de información que te oriente y te ayude a fortificar tu confianza. Si tienes problemas más serios nunca dudes en acudir con un profesional, ¡para eso existen!, para ayudarnos con aquello que nosotros desconocemos.
C. COMPROMETERSE. Quizás hayas realizado los dos puntos anteriores pero existe un último paso para despegar hacia la conquista de tu propio Ser. Comprometerte con el trabajo diario de HACER LO QUE ES NECESARIO para fortalecer tu autoconfianza. Comprometerte contigo mismo. Si solo aceptas y coleccionas información pero no pasas a la acción, seguirás manteniendo los mismos patrones de temor, angustia, timidez y nerviosismo que no te han dejado crecer. ¡ACTÚA, PONTE EN ACCIÓN! La práctica hace al maestro, y este dicho aplica en todos los sentidos y niveles del quehacer humano.
En la medida que aceptes tus deficiencias, busques ayuda y te comprometas contigo mismo, TU ÉXITO ESTÁ ASEGURADO. No cejes en el esfuerzo, que no disminuya tu empeño y en poco tiempo estarás gozando los frutos de convertirte en una persona segura de sí misma, con aplomo, templanza y una mentalidad enfocada en Alcanzar el Éxito..
Recuerda:
“El amor a uno mismo es el punto de partida del crecimiento de la persona que siente el valor de hacerse responsable de su propia existencia”. Viktor Frankl
¡Confía en ti mismo!
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